Los dientes podridos son aquellos donde la caries es tan extensa que crea un hueco importante de color negruzco en el diente. Es importante acudir al odontólogo antes de que lleguemos a esta situación, ya que la supervivencia del diente está en juego.
¿Por qué se me ha podrido el diente?
Generalmente la presencia de caries tan extensas suele estar vinculada a una higiene inadecuada, aunque en ocasiones pueden existir problemas a nivel del esmalte de nuestros dientes que haga que no sea lo suficientemente fuerte para resistir los ataque de las bacterias que hay en la cavidad oral.
¿Cuáles son los síntomas más frecuentes?
Generalmente los pacientes acuden porque comienzan a tener sensibilidad con los alimentos o bebidas, fríos y calientes.
También pueden aparecer molestias con alimentos con un alto contenido de azúcar.
Otros síntomas son el mal olor o sabor de la boca.
A medida que la afectación del diente es más severa puede acabar produciendo una inflamación de la pulpa dental, provocando un dolor que se puede intensificar por la noche. Si sigue avanzando la caries, puede acabar existiendo un flemón con la correspondiente hinchazón fuera de la boca.
¿Qué solución tienen los dientes podridos?
La solución de los dientes podridos es retirar todo el tejido afectado y cerrar la cavidad que haya quedado. En el caso que haya afectación de la pulpa, habrá que hacer un tratamiento de conducto.
Pero si el deterioro del diente es muy grande, puede ser necesaria la extracción dental.
